Por Manuel Gómez Sabogal
Y queda bien el título. Es una luchadora. Estudió Comunicación social. Quiso participar en Rayuela y acepté que lo hiciera. Su timidez era del otro mundo.
Era una niña. Muy linda, mimada, sencilla y llena de optimismo. Recuerdo que en los dos primeros programas en los cuales estuvo, no moduló sino: “Buenas noches” y “Hasta el próximo jueves”. Sin embargo, yo creía en ella. Sabía que era capaz de salir adelante, leer, hablar, y hasta improvisar, parte interesante en Rayuela.
Y lo hizo. Logró superar ese miedo escénico en el programa. Superó todas las expectativas. Tanto que, un día llegó e improvisó algo que, en cabina, quedamos anonadados. Ella no se presentó al programa. Llegó una argentina en su cuerpo. Comenzó a hablar y los oyentes se creyeron el cuento…
Ahí, se inició una meteórica carrera de Sandra, al interior de Rayuela
Terminó sus estudios y se fue a Bogotá a probar, a trabajar. Porque siempre ha sido una guerrera, una luchadora. Primero, en el Congreso de la República y luego con el Ejército Nacional. Después, en la Escuela Superior de Guerra. Recorrió el Caquetá… aprendió, mejoró demasiado, vivió.
En el Quindío, también trabajó en diferentes cargos. Se dio a conocer como una gran comunicadora.
Ha tenido momentos difíciles y ha salido adelante. Los ha superado, aunque nos ha hecho sufrir.
Hace un año, viajó al Cauca a trabajar allá. Lo ha hecho muy bien.
Y Dios la quiere mucho tiempo más para muchas labores que serán exitosas. Porque ha aprendido mucho y hace cosas estupendas.
Es un ejemplo para muchos jóvenes que estudian Comunicación Social y quieren ser mejores cada día. No se rinde a pesar de las dificultades.
Estuvo en Chile, regresó y siguió siendo la misma guerrera. Con todo. Momentos tristes, los quiere olvidar y eso está bien. No desea recordar eso, sino buscar que sus metas sean las mejores. La admiro por ser como es. Y es un ejemplo…
Hace unos meses, me sorprendió con una nota que escribió en su Facebook:
“Siempre volvemos a los lugares y personas donde se amó la vida, Manuel fuiste el primero en creer en mí y abrirme las puertas del mundo de la radio, RAYUELA por más de 4 fue sin duda mi gran escuela y tú ese profe de U que algunos estudiantes pudimos disfrutar. Muchos libros leídos, cientos de autores entrevistados y muchos cacharros compartidos en cabina. Volvemos, siempre volvemos”
No esperaba ver ese escrito. La quiero mucho y ella lo sabe. Es una mujer maravillosa y tendrá muchos éxitos.
En la vida, le irá muy bien. Obtendrá mucho reconocimiento, porque logra lo que se propone y siempre sale adelante. Su positivismo, responsabilidad y fortaleza la hacen una maravillosa mujer. Por eso,
Sandra es una verdadera guerrera…