Cada vez somos más conscientes de la importancia de lucir una dentadura blanca y bonita, porque no solo es sinónimo de higiene, además conseguiremos una belleza mucho más armónica. Una sonrisa bella aumentará nuestra seguridad y autoestima, bien lo saben los famosos que gastan cantidades ingentes de dinero en tratamientos carísimos para acabar con los dientes amarillos, torcidos, separados.
Algunas causas de la coloración amarillenta de los dientes son:
– Fumar de manera habitual generará manchas, debido a la presencia de nicotina y alquitrán en los cigarrillos, que difícilmente se podrán eliminar.
– Bebidas como el café, el vino tinto, el té… pueden intensificar el color amarillo o amarronado. Así que si tienes este problema intenta reducir su consumo lo máximo posible.
– Medicamentos con presencia de tetraciclina o doxiciclina, también ciertos antidepresivos, antiestamínicos o tratamientos para la presión arterial elevada.
– El uso excesivo de flúor, sobre todo a edades tempranas, puede provocar la aparición de pequeñas manchas que ni con el mejor de los tratamientos de blanqueamiento dental desaparecerán.
– Golpes que afectan a la pulpa dental (parte interior del diente) cambiando su color y que se pueden tratar eficazmente.
Algunos remedios para evitar la coloración amarillenta:
Una vez conocemos los motivos que pueden amarillear los dientes, podemos intentar poner remedio gracias a algunas recetas naturales, caseras y efectivas:
1. Limón: Mojar el cepillo de dientes con agua tibia tirando a fría y añadir 1 gota de jugo de limón para finalizar cepillando normalmente. La cantidad es importante, no conviene exceder esa única gota o por el contrario conseguiremos dañar nuestra dentadura. (3 días y abstenerse personas con dientes o encías sensibles.)
2. Bicarbonato de sodio: Mezclar un tercio de cuchara de bicarbonato de sodio con la pasta de dientes que utilicemos normalmente (aunque sería recomendable comprar una blanqueadora para potenciar su efectividad). Cepillar normalmente y, a continuación, con la ayuda de un pañuelo de papel, realizar pequeños movimientos circulares para que la solución penetre y actúe mejor.
Conviene realizar este tratamiento por la noche, aunque también se puede aplicar al medio día.
3. Enjuague bucal, agua oxigenada y bicarbonato de sodio: Necesitarás menos de medio tapón de enjuague, menos de media cucharada de agua oxigenada y una puntita de bicarbonato. Enjuagar la boca durante un minuto con el preparado antes de irse a dormir.
Vía Facilísimo