Guerra Civil Española
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Antecedentes
En la década de los 1930’s, España era un país profundamente dividido y que fue separado entre los Nacionalistas de derecha y los Republicanos de izquierda. El partido Nacionalista estaba conformado por monarquistas, terratenientes, empleadores, los miembros de la Iglesia Católica y por el Ejército. El partido Republicano consistía de trabajadores, sindicalistas, socialistas y campesinos.
Económicamente, el país fue duramente golpeado por la Gran Depresión, luego de la caída de la Bolsa de Wall Street. En parte como consecuencia de ella, la dictadura militar que gobernó España desde 1923 colapsó en 1929, y el 1931, el Rey Alfonso XIII abdicó luego de asumir el poder el Partido Republicano.
Luego siguió un período donde los dos partidos rivales se alternaban en el poder. El país estaba tan inestable y dividido que en 1936 el Ejército se rebeló y arrojó a los Republicanos del poder. La Guerra Civil Española había comenzado.
La importancia de España en Europa
Si España sucumbía a los Nacionalistas, Francia sería rodeada por gobiernos fascistas (Alemania e Italia). Si Francia fuese invadida por naciones fascistas, las alianzas entre otras naciones antifascistas se debilitarían. De hecho, habría una nación menos para resistir a los planes expansionistas de los fascistas, y un ejército menos para enfrentarse a ellos.
España tenía bases navales estratégicas a los largo del Mar Mediterráneo y del Océano Atlántico que pudiesen ser usados por los fascistas para controlar los embarques y establecer bases submarinas. Pudiesen ser usadas para imponer presión militar y económica a otras naciones europeas.
Los poderes fascistas
Hitler y Mussolini (líderes fascistas de Alemania e Italia) enviaron miles de tropas y armas a España para ayudar a las fuerzas Nacionalistas. Ambos tenían metas similares y deseos comunes de ver a España bajo el control de los Nacionalistas de derecha.
Como aliados fascistas, era el interés de Alemania y de Italia el luchar contra la expansión del comunismo en Europa. Ellos no querían que España, un vecino cercano a ambas naciones, se convirtiera en un enclave soviético. De hecho, la oposición fue real. Si España quedaba bajo el control de los Nacionalistas, podría ser un aliado importante para ambos países en caso de algún conflicto futuro.
De hecho, si otra nación europea adoptase el credo fascista, enviaría un mensaje al mundo entero señalando que no se debían de meter con los fascistas.
Las Democracias
Francia y Gran Bretaña se encontraban en una situación incómoda con respecto a España. Ellos no querían que la nación española cayera bajo el poder de los Nacionalistas ya que fortalecería el poder de la alianza fascista con Alemania e Italia. De igual manera, no querían que España cayera bajo el poder de los Republicanos apoyados por los Soviéticos, ya que el Comunismo era visto como una gran amenaza a la paz mundial.
Los franceses y británicos acordaron una política mutua y establecieron un Comité para la No Intervención, que efectivamente bloqueó el apoyo internacional que fue enviado a España. Ellos no detendrían, sin embargo, la ayuda que Alemania e Italia enviaban a los Nacionalistas (tanto en soldados como en suministros). El resultado de ellos fue que los Republicanos tenían que depender de la caridad dudosa de la URSS de Stalin.
La Unión Soviética
La URSS envió armas y suministros para ayudar a los Republicanos en su lucha contra las fuerzas fascistas, pero no se comprometió en el conflicto como lo hicieron Alemania e Italia. El líder ruso, Stalin, le vendió suficientes suministros a los Republicanos para que se mantuvieran en la pelea. Stalin estaba contento con mantener a Alemania ocupada de España, en vez de estar pendiente de la Europa Oriental.
Las Brigadas Internacionales
La lucha contra el fascismo unió a jóvenes de toda Europa y EEUU a España. Peleando por los Republicanos, los idealistas, socialistas y comunistas formaron una milicia que tenía como objetivo preservar la democracia y oponerse a la amenaza de las fuerzas de la derecha. En el momento más culminante, se lograron contar 15.000 personas luchando en las Brigadas Internacionales.
Los resultados
- Las fuerzas Nacionalistas, mejor organizadas y mejor equipadas, ganaron la guerra luego de capturar Madrid en Marzo de 1939.
- La posición de Hitler en Europa se fortaleció, al tener un aliado potencial en el ahora Dictador derechista de España, General Francisco Franco.
- La participación y cooperación en la Guerra Civil Española fortaleció los lazos entre Alemania e Italia. Como resultado de ello, se formó el Eje Roma-Berlín. Italia y Alemania eran ahora aliados.
- Al ignorara al Comité de No Intervención y a sus arquitectos, Francia y Gran Bretaña, Hitler mostró su influencia en los asuntos europeos.
Traducido y recopilado por Luis Castellanos
Referencias
- Britannica: Spanish Civl War
- History: Spanish Civil War breaks out
- BBC: Spanish Civil War
- Spanish War History: The Spanish Civil War