¿Acabas de salir de una relación en la cual te engañaron? ¿Tienes sospechas de que tu esposo está saliendo con alguien más? ¿Últimamente tu pareja se comporta de manera extraña? Definitivamente el engaño es un asunto que nos ha tocado a todos de alguna manera. Tal vez has sido la víctima directa o has escuchado hablar de esta situación por alguien más. Lo único cierto es que saber cómo afrontar una infidelidad puede ser un camino bastante espinoso.
La infidelidad es un tema tan recurrente y tan antiguo que no falta como tema de conversación entre amigos, compañeros, familiares, entre otros. Sin embargo, hasta ahora los psicólogos han empezado a estudiarla con mayor detenimiento y científicamente. Por esto, en Phrònesis te traemos unos datos que tal vez no conocías y que de seguro te dejarán boquiabierto.
1. Si ellas ganan más, ellos engañan más
Tanto los hombres que ganan menos como aquellos que tienen el poder económico en la relación suelen ser los más infieles. Por una parte, aquellos que tienen unos ingresos menores a los de su compañera pueden sentirse inferiores. Y, por otro parte, aquellos que aportan más del 70% de los ingresos del hogar pueden sentirse con el poder de echarse una canita al aire de ves en cuando.
La revista American Sociological Review en 2015 encontró, al estudiar a 2.900 personas que tenían un rango de edad entre 18 y 32 años, que ganar menos era un factor de riesgo para caer en la infidelidad. Además, este se hacía más recurrente en hombres que en mujeres. Es decir, el 15% de los hombres económicamente dependientes engañaban más frente al 5% de las mujeres en esa misma situación.
2. ¿Hombre con hombre y mujer con mujer duele más?
Si normalmente duele que te engañen con otra persona, imagínate que sea del sexo opuesto ¿Qué harías? ¿Cómo te sentirías? Seguramente te preguntarías, ¿me estuvo mintiendo todo este tiempo y era homosexual? Pues afrontar una infidelidad es cosa seria y le duele más a ellos cuando es con alguien del sexo opuesto, según un estudio de la revista Personal Relationships.
Los hombres sienten mayor ira cuando su pareja les es infiel con una persona del otro sexo. Les duele tanto que son más propensos a acabar con la relación inmediatamente. Sin embargo, al mismo tiempo se sienten atraídos y hasta excitados cuando se presenta esta situación.
Cuando este tipo de infidelidad toca a las mujeres… sin restar importancia al engaño con una persona del mismo sexo, para ellas ser engañadas con un hombre es razón suficiente para terminar la relación.
3. Ellas quieren amor y ellos sexo
Es común escuchar decir que cuando hay engaño ellas suelen buscar afecto y ellos solo sexo. Las mujeres quieren llenar los vacíos que les deja su matrimonio o relación en cuanto a lo sentimental. Mientras que los hombres desean calmar esa necesidad biológica o entregarse a la pasión. Así lo confirma un estudio de la revista Evolutionary Psychology.
Pero, ¿en realidad cómo reacciona cada uno ante una situación así? El estudio encontró que ellos se sienten peor cuando su compañera tiene relaciones sexuales con otro que cuando se enamora. Es decir que para los hombres es de mayor gravedad la infidelidad física que la emocional. Por el contrario, para las mujeres es peor cuando su pareja se enamora de la amante.
Ya sea una infidelidad amorosa o sexual, saber cómo afrontarla es la clave para crecer como persona y poder abrirte a un nuevo amor. ¡Recuerda que este dolor que sientes no durará para siempre!
4. La infidelidad está en la genética
A diferencia de los animales como el cóndor, los cuales solo tienen una pareja durante toda su vida, los humanos no somos genéticamente fieles. Por esto, tomar este voto es una decisión y un acuerdo con nuestra pareja. Además, como muestra un estudio publicado en la revista Evolution and Human Behavior, hay personas que por su condición hereditaria tienden a ser más infieles que otras.
Los científicos de la Universidad de Queensland encontraron en su estudio que la genética fue la culpable de que el 40% de las mujeres y el 62% de los hombres fueran infieles. Sobre todo, aquellos con mayores receptores genéticos a la oxitocina y la vasopresina (hormonas del amor). Sin embargo, sobra decir que lo anterior no implica que este tipo de comportamientos no se puedan controlar.
¿Qué piensas de todos estos datos? ¿Te han sido infiel alguna vez? ¿Eres fiel?