Por Manuel Gómez Sabogal
Así, en inglés. Una locura en 1989, después de mi regreso de la Universidad de Brighton en Brighton, Inglaterra, donde estuve en un curso de radio y televisión.
Allá compartí con ingleses, austríacos, búlgaros, brasileños, checos, alemanes, griegos, franceses, italianos, polacos y dos colombianos más (Rodrigo Arias de Medellín y Amelia Acevedo de Bucaramanga). Los docentes habían laborado o continuaban en la BBC de Londres.
Pues bien, llegué de Inglaterra a punto de iniciar el semestre. Me asignaron un grupo primero de Lenguas Modernas. Mis pilas bien puestas y dispuesto a hacer algo diferente, especial, utilizando innovación y creatividad (dos palabras que me encantan).
Con el correr de los días, recordando que había hecho teatro en Brighton, diseñé un plan de trabajo y llamé a algunos estudiantes que desearan acompañarme en esa locura. Otra más en mi vida.
Al comienzo, se reían, pero les entregué los sketches (escenas) para que leyeran, discutieran y prepararan si deseaban. Eso sí, les dije que presentaríamos esa locura en el Aula Máxima “Camilo Torres” a finales de septiembre.
La Universidad era un solo bloque, pequeña y casi todos nos conocíamos, directivos, docentes y estudiantes vivíamos como en una caja grande.
Dicho y hecho, mis alumnos aceptaron el reto. Ann Thomson, Eliana Walteros, Adriana Cocuy, Aline Grisales, Lina Calle, Luz Carime Carmona, Santiago Riascos, Álvaro Echeverri, y Jaime Elías González.
Nos sentamos a conversar, practicar, estudiar cada sketch y a medida que pasaban los días, cada uno mejoraba y se animaba.
Preparé el programa, el cual incluía dos actos y un intermedio. Yo, dándomelas de director de teatro, busqué música adecuada, ellos analizaron vestuario, luces, y nos dimos a la tarea.
El día de la presentación, llegamos con 30 minutos de anticipación a los camerinos. Yo salía a mirar si había público, teniendo en cuenta que era una presentación en inglés, totalmente. Para sorpresa de todos, quedaron de pie y situados casi que por fuera del recinto, estudiantes y personas de otras entidades que querían ver algo diferente, especial y nuevo en la Universidad del Quindío.
El evento incluyó Act One: Warm up (calentamiento). Wake up (Despertar). A song (una canción). Yoga for beginners (Yoga para principiantes). Colombians three classes (Tres clases de colombianos. The bank (El banco). A song (una canción).
Intermedio en el cual hubo música.
Act Two: The travel agency (Agencia de viajes). Married couples (Parejas). British accents (Acentos británicos). A song (Una canción). How to make friends (Cómo hacer amigos). The eternal triangle (El triángulo eterno). A song (Una canción)
Las canciones en inglés eran interpretadas por alumnos del programa de Lenguas Modernas. Nos apuntamos un éxito. Aplausos, muchos aplausos y alegría en los camerinos.
Quedó comprobado que el inglés es un idioma y no una materia. Así mismo, el inglés no se estudia, se practica.
Tarea para los docentes, cambiar el esquema, innovar y crear… Las locuras valen la pena.