El filtro de café fue inventado por un ama de casa alemana. Melitta Bentz de Dresden, Alemania, le preparaba una taza de café a su esposo todas las mañanas. Después de que él se iba al trabajo, ella pasaba horas limpiando los sedimentos de café de la olla de latón usada porque su familia no podía permitirse comprar filtros de café de tela.
Cansada de dedicar tanto tiempo a una tarea tan tediosa, Melitta ideó una solución: primero, perforó agujeros en el fondo de su olla de latón con un clavo. Luego tomó una hoja de papel secante del cuaderno escolar de su hijo y la usó para forrar el fondo de la olla. Colocó la tetera forrada encima de una taza de café, la llenó con café molido y vertió lentamente agua hirviendo sobre ella. Su experimento dio origen al filtro de café moderno.
Después de descubrir este filtro de café higiénico, económico y fácil de limpiar, Melitta y su esposo iniciaron un negocio juntos. Patentaron su invento el 8 de julio de 1908 y las ventas recibieron un gran impulso en 1911, después de que el filtro de café de Melitta recibiera una medalla de oro en la Exposición Internacional de Higiene. Hoy en día, Melitta es una empresa internacional y los filtros de café de papel que inventó su homónimo se consideran un artículo imprescindible para preparar café en el mundo moderno.