Quiero extender disculpas a los lectores que no son venezolanos y que no están al corriente con algunas de las cosas que ocurren en Venezuela, por traer estos párrafos que expresan mi perplejidad. Les reitero: espero me dispensen.
Me parece increíble que tantas personas estén aplaudiendo, felices y contentos, el hecho de saber que 5 tanqueros iraníes están en camino de llevarle gasolina al gobierno de Venezuela.
BBC | DW | 20 minutos
Y para muchos, será un éxito que los tanqueros lleguen a su destino y descarguen su valiosa mercancía. Pero más bien todos los venezolanos deberíamos estar tristes y molestos.
En primer lugar, se puede ver que una de las teorías acerca de por qué tanta cuarentena en Venezuela, y tanto control en el expendio de gasolina, era cierta: no hay gasolina en Venezuela. Y el COVID-19 ayudó con una buena excusa para imponer restricciones en la venta de gasolina a la población en general.
En segundo lugar, se puede ver que otra de las teorías que se ha esgrimido en los últimos años acerca del deterioro de PDVSA, de su aparato productivo y de su aparato refinador, también es cierta. De ser una país con una de las empresas petroleras más prósperas del mundo, que tenía la capacidad de producir millones de barriles de petróleo al día y de producir gasolina para abastecer el mercado interno y con un remanente para exportar, ahora tiene que importar gasolina.
Y no es la primera vez que se importa gasolina, ya que ha ocurrido en pocas ocasiones, y muy puntuales. Pero si es la primera vez (que se sabe) de una importación masiva de gasolina.
Pero con fuerzas militares de los EEUU en el Caribe, conduciendo ejercicios militares y operaciones anti droga, se le agrega un nuevo ingrediente a la sopa: ¡los malvados gringos van a detener y confiscar los tanqueros iraníes y nos privarán a los venezolanos de tener gasolina! Si no llega la gasolina a Venezuela, será culpa de EEUU. Y si llega la gasolina a Venezuela, será un triunfo revolucionario sobre el «imperio».
Por cierto, cada vez que escucho a los revolucionarios hablar del «imperio», no puedo evitar recordar a Darth Vader y el «Imperio Galáctico».
Si Venezuela no tiene gasolina, es culpa de otros. De cualquiera, menos de los propios venezolanos. La culpa no es de quienes despidieron a los empleados formados técnica y administrativamente para trabajar en el sector petrolero, ni de quienes gastaron el dinero para el mantenimiento e investigación en obras sociales sin retorno de inversión para la empresa petrolera, ni de quienes colocaron en sus cuadros a personas incapaces y sin la formación adecuada, ni de otras personas más.
En fin. Preparémonos entonces para recibir con bombos y platillos a los tanqueros iraníes, que nos traen la tan necesaria gasolina, que una vez producíamos y exportábamos. Y milagrosamente, veremos también como se levanta la cuarentena y se anuncia el triunfo de Venezuela sobre el COVID-19.
Quisiera dejar una pregunta en el aire: ¿resolverán estos tanqueros la merma en la producción de gasolina en Venezuela? ¿Será otro pañito de agua caliente? ¿O serán los primeros 5 tanqueros de muchos que van a seguir viniendo para abastecer de gasolina a un país que solía tener una industria petrolera con sólidos ingresos, conocimiento, experiencia y reputación en el mundo?
Luis R Castellanos