La depresión es un trastorno del estado de ánimo que se caracteriza por la pérdida de interés y placer en las actividades diarias.
Las personas con depresión a menudo demuestran otros síntomas, como pérdida o aumento de peso, insomnio o sueño excesivo, bajos niveles de energía, problemas de concentración, sentimientos de culpa e ideación suicida.
De hecho, por el efecto que tiene en la calidad de vida y la motivación, esta se considera una de las principales causas de discapacidad a nivel mundial.
Según la Organización Mundial de la Salud, más de 264 millones de personas en el mundo, de todas las edades, han sido diagnosticadas con depresión. Se trata de una enfermedad común que puede afectar a nuestros hermanos, padres, hijos, nietos, amigos y compañeros de trabajo.
Parte de la prevención consiste en estar bien informado y saber con qué lidiamos. Para que estés en capacidad de ayudar a otras personas y cuidar de tu propia salud mental, preparamos una lista con datos importantes sobre la depresión que necesitas conocer.
- Aunque el fallecimiento de un ser querido, quedarse sin empleo o divorciarse pueden ser causas de depresión, a veces el único motivo son las sustancias químicas en tu cerebro. Estas sustancias regulan tu estado de ánimo y, cuando están en desequilibrio, alteran tu humor aunque todo en tu vida marche bien.
- Se estima que al menos el 4.4% de la población mundial sufre de depresión. La mayoría de los casos se concentra en el Sudeste Asiático (27%) y la región del Pacífico Occidental (21%).
- Pasar demasiado tiempo discutiendo problemas con amigos puede aumentar los síntomas depresivos, una razón más para enfocarte en lo positivo.
- Si tus abuelos o padres fueron diagnosticados con depresión, las probabilidades de que tú también la desarrolles aumentan.
- Entre los factores de riesgo que pueden contribuir a la depresión están: el consumo de alcohol y drogas, los cambios hormonales, los cambios estacionales (muchas personas se sienten más tristes en invierno), el estrés y los eventos traumáticos.
- Las mujeres son más propensas a exhibir síntomas de depresión durante el embarazo, la menstruación, la menopausia y después del parto. Tener problemas de tiroides también puede influir.
- La pérdida de deseo sexual es un síntoma que podría estar relacionado con la depresión.
- Si bien muchos niños no tienen tantos problemas como los adultos, sí enfrentan situaciones estresantes en la vida diaria, como el bullying y las dificultades para hacer amigos. Todo esto aumenta el riesgo de sufrir depresión en la infancia.
- La dieta también tiene que ver. Se recomienda que evites los alimentos procesados, el azúcar, los granos refinados y el exceso de cafeína para disminuir las probabilidades de desarrollar depresión.
- Hacer ejercicio regularmente nos ayuda a subir el ánimo y gestionar mejor el estrés, por lo que esta es una excelente herramienta para tratar y prevenir la depresión.
Actuar a tiempo puede cambiar la historia
A pesar de todo lo que ahora sabes de la depresión, también hay un dato positivo y es que los pronósticos de recuperación son buenos cuando el tratamiento se inicia a tiempo.
Si alguien cercano presenta síntomas de depresión, o eres tú quien nota cambios extraños en tu estado de ánimo, consúltalo con un profesional lo antes posible.