De Eternos Rivales a Eternos enemigos
En Venezuela es harto conocida la eterna (bueno, desde los últimos 50 años más o menos) rivalidad entre los equipos de Béisbol de la liga profesional denominados los gloriosos “Leones del Caracas” y los “Navegantes del Magallanes”.
Podíamos asistir a los juegos de la temporada donde se competía en el campo y en las gradas, cada quien en su equipo favorito. Y al final del partido, caraquistas y magallaneros, eternos rivales en el estadio, volvían a ser amigos y compinches por arte de magia (así como el episodio de “Ralph y Sam” que comenté en la publicación anterior.
De hecho, se puede ver la película “Papita, Maní, Tostón“, de la mano del cineasta Luis Carlos Hueck que retrata muy bien esa rivalidad entre la fanaticada, y nos da un mensaje de unidad y de solidaridad al final de la cinta, dándonos a entender el deber ser.
Volvemos de nuevo a la conclusión de la publicación anterior, donde aún me sigue gustando más el tiempo pasado que el presente.
Todo esto nos lleva a pensar en la presencia de una polarización muy marcada en Venezuela.
Como comenté con anterioridad, analizando los últimos resultados electorales en Venezuela:
Eso convierte al país en un masa dividida en dos pedazos casi iguales (de acuerdo a los últimos resultados electorales emitidos por el CNE): un pedazo de la torta con el 50,61% y otro pedazo con el 49,12%.
Polarización viene del verbo “polarizar”…
Orientar en dos direcciones contrapuestas (DRAE)
Cuando hablamos de un mundo bipolar siempre me recuerda la Guerra Fría entre los EEUU y la URSS, donde se veían claramente los dos polos. Creo que lo que más me gustó de ese mundo bipolar fue la serie de películas de James Bond “007” y la caída del Muro de Berlín.
Pero ahora en Venezuela cuando se habla de la polarización se habla precisamente de ese país bipolar en el que vivimos actualmente. Donde hay una situación maniqueísta muy evidente.
Maniqueísmo:
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m. Religión sincrética fundada por el persa Manes en el siglo III, que admitía dos principios creadores en constante conflicto: el bien y el mal.
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m. peyor. Tendencia a reducir la realidad a una oposición radical entre lo bueno y lo malo. (DRAE)
Y no es un maniqueísmo como el de los eternos Rivales. Es un maniqueísmo permanente donde el país se divide entre azules y rojos, buenos y malos, los que están conmigo y los que están en mi contra.
Me gustaba más el país donde todos eramos hermanos, sin importar el color político, ni el equipo de béisbol del cual eres fanático
Me gustaba el país donde se gobernaba para todos, y no sólo para los que están en un 1×10 o los que están inscritos en el partido de gobierno.
Insisto: desde donde yo lo veo, todo tiempo pasado si fue mejor.
Ahora nos queda trabajar para construir un futuro, que sea mejor que ese pasado.
Escrito por Luis Castellanos