Y otras cosas
Ladrones de tiempo: la banda internacional del fracaso
En cualquier parte del mundo, desde un palacio de gobierno hasta un baño público, estos criminales se encuentran al acecho para robarle algo que JAMÁS podrá recuperar: su tiempo.
Este recurso precioso, no renovable pero de altísimo potencial, se ha convertido en la “damisela en apuros” del siglo XXI. Paradójicamente, a pesar de que la tecnología inventa más y más recursos para aumentar la productividad laboral, artística e intelectual de las personas cada día, estos villanos inclusive se han puesto de acuerdo para agruparse en una banda que no ceja su esfuerzo en secuestrar, para nunca devolver, ese tiempo que usted pudo haber usado para tomar una decisión importante, para mejorar su salud, su condición laboral o sencillamente para disponer de él bajo su total voluntad.
Acuso formalmente ante el distinguido lector a estos indeseables:
- Las interrupciones de terceros por no haber recibido o no haber prestado atención a las instrucciones.
- Internet y sus amigos (Twitter, Facebook, Instagram y otros)
- Los correos electrónicos de propaganda(A los cuales HIPNÓTICAMENTE nos suscribimos creyendo que los vamos a poder leer todos)
- La improvisación en el trabajo (este de ladrón puede ascender a quinto jinete del apocalipsis fácil)
- El primo del 4, las agendas inútiles en las reuniones.
- Los bancos y sus fieles secuaces, los cajeros.
- Los grandes edificios de oficinas PERO CON PEQUEÑOS ESTACIONAMIENTOS.
De este grupo, extrañamente, la televisión fue convicta y confesa pero está por salir en libertad bajo palabra. Si una persona duerme ocho horas promedio diarias, proporcionalmente emplea un tercio de su vida en soñar. ¿Ha pensado usted cuánto tiempo de las 16 horas restantes estos “choros” le quitan?
Ármese contra ellos: planifique, reparta su tiempo inteligentemente, convierta la cantidad de tiempo en tiempo de calidad para usted, los suyos y su trabajo EN ESE ORDEN.
Estos siete tipos están como “La Legión del Mal”: siempre alertas, buscando que inventar para llevar a cabo sus tropelías.
Jorge Sánchez
Revista DTyOC