Pueblos portuarios italianos que no son conocidos por los turistas
Todos conocen (y aman) Positano, Portofino y Cinque Terre. Pero Italia es el hogar de pequeños pueblos portuarios poco conocidos, que son tan igual de espectaculares y están libre de turistas.
1. Porto Venere
El pequeño pueblo de pescadores de Porto Venere está a pocos minutos en lancha desde los famosos pueblos de Cinque terre, y comparte sus bellezas y encantos, sin los turistas asfixiantes. El puerto en sí es muy pintoresco, pero es preferible explorar el pueblo rústico, donde encontrarás ruinas antiguas espectaculares, bellas iglesias y un viejo castillo con vista panorámica sobre el pueblo y sobre el Mar de Liguria, de aguas turquesas.
2. Piombino
Anteriormente era una base naval, y actualmente el asombroso puerto de Piombino es usado para transporte de carga y como marina. La leyenda dice que Napoleón Bonaparte le regaló el bello pueblo costero a su hermana, quien rápidamente lo llamó «pequeño París». Es difíciol no ver por qué. Piombino tiene arquitectura extravagante, fuentes, museos, y otras atracciones culturales. Se recomienda caminar hasta la cumbre en Piazza Bovio, donde se puede disfrutar de una espectacular vista de la bahía y de la isla de Elba, hogar de las playas más bellas y secretas de Italia.
3. Porto Santo Stefano
Este bello pueblo portuario de la Toscana, a sólo minutos de L’Argentario y de la Isla Giglio, tiene una fortaleza antigua construida por los españoles en el siglo VII. También alberga dos torres de vigilancia españolas de la misma época, que ofrece vistas insuperables del puerto. ¿Prefieres la comida a la historia? No hay problema, Porto Santo Stefano es conocido por tener la mejor comida del mar de los alrededores, y algunos de los mejores restaurantes toscanos.
4. Ponza
El bello pueblo de Ponza es el hogar de un gran puerto cubierto para pesca y marina, rodeado por restaurantes, boutiques y cafés. A pesar de que el pueblo tiene mucha actividad, Ponza se mantiene relativamente libre de visitantes foráneos (la mayoría vienen de Roma, que está a dos horas de viaje). Viaja a Ponza y descubre unos espectaculares pozos para nadar y su bahía en forma de luna, Chiaia di Luna, fácilmente una de las playas más asombrosas de Italia.
5. Tropea
Tropea fue construido como un puerto comercial durante la época del Imperio Romano (la leyenda dice que Jasón lo reclamó como recompensa durante su búsqueda del Vellocino de Oro). Jasón tenía buen gusto: con acantilados espectaculares, arquitectura exquisita, y playas de arena blanca, quisiéramos también reclamar a Tropea como recompensa también. El centro amurallado de la ciudad es denso, con bellas boutiques, trattorías acogedoras y heladerías (gelaterias), pero sorprendentemente no hay turistas extranjeros visitando.
6. Camogli
Camogli es uno de los secretos más guardados de Italia. Vente a degustar un buen vaso de prosecco y mira el sol caer sobre la Riviera Italiana. Este colorido pueblo portuario aún permanece como el refugio de verano para los acaudalados de Milán y Turín, pero eso no quiere decir que no puedas disfrutar la vida de lujo, así sea por unos días. Al contrario de las calles angostas y llenas de turistas de Portofino, Camogli tiene piazzas abiertas y tranquilas, y caminos naturales que te llevan a vistas costeras espectaculares.
7. San Remo
Con sus bellos acantilados a orillas del mar, sus hoteles de Belle Époque y un casino de Art Noveau, el puerto de San Remo no es exactamente un secreto, pero aún se esconde a la sombra de su vecina Portofino. ¿Y por qué venir a San Remo en vez de a Portofino? El área tiene una grandeza del viejo mundo, y playas arenosas que están mucho menos concurridas, y con el sobrenombre de «La Ciudad de las Flores» (La Cittá dei Fiori), vale la pena.
8. Gaeta
Entre Roma y Nápoles, el bello pueblo de Gaeta está en un promontorio sobre el Golfo de Gaeta. El pueblo, principalmente un puerto pesquero y de combustible, tiene las típicas casas de colores pasteles, callejones angostos, iglesias medievales y hasta un castillo del siglo XIII. Hay algunos espacios de la playa pública que están disponibles para visitar, lejos del puerto de aguas profundas. Pero la atracción principal acá es la Montagna Spaccata, una montaña que supuestamente fue partida en dos por un terremoto.
Traducido por Luis Castellanos de publicación en Condé Nast