Planifiquemos el día de acuerdo a los ciclos de energía de nuestro cuerpo
Nuestro cuerpo tiene ritmos naturales de energía durante el día. Si los identificamos adecuadamente, podemos tomar ventaja de los momentos en que tenemos más energía. Josh Kaufman, autor del libro «El MBA Personal», explica que prestarle atención a tus ciclos de energía y trabajando de acuerdo a ellos sacará el mayor provecho del tiempo disponible. Para empezar, se deben considerar las siguientes preguntas:
- ¿En qué momento nos sentimos más llenos de energía?
- ¿A qué hora del día es la más adecuada para hacer cierto tipo de actividades?
- ¿Qué hacemos para gestionar nuestra energía durante el día?
Tomemos siestas energizantes diariamente
¿Crees que tomar siestas es de gente floja? Piensa de nuevo. Muchos estudios reportan que una breve siesta de 20 minutos puede mejorar el estado de alerta, el rendimiento psicomotor, y el ánimo. Algunas sugerencias para aprovechar las siestas:
- Planifiquemos cuándo tomar la siesta de acuerdo a nuestro ciclo de despertar-dormir. Para muchas personas se encuentra entre mediodía y las 4 de la tarde.
- No debemos dormir demasiado. Una siesta de 20 a 40 minutos puede refrescarnos el día sin afectar la hora normal de acostarnos en la noche.
- Tomemos de 10 a 15 minutos para despertarnos completamente antes de continuar una labor demandante.
Despertemos todos los días a la misma hora
Cada vez que nos despertamos temprano y tenemos una mañana activa, nos sentimos mejor y tenemos un día más productivo. El problema viene cuando apretamos el botón de «SNOOZE» del despertador varias veces. Inevitablemente empezamos el día con flojera. Matt Galligan, Presidente de Circa, se entrenó a si mismo para levantarse todos los días a la misma hora de la siguiente manera: programó su alarma a la misma hora en la mañana por 30 días, y resistió a la tentación de apretar el botón de «SNOOZE». Los resultados fueron impresionantes.
Si nos acostumbramos a levantarnos a la misma hora todos los días, estaremos más alertas, tendremos mañanas libres de estrés, e iremos a trabajar en calma y centrados. Y en el mundo tan caótico de hoy en día, ¡eso es una buena ayuda!
Bebamos mucha agua
¿Por qué debemos beber más agua? Si no bebemos agua, nos moriremos. Es así de simple. Nuestro cuerpo está compuesto por casi 60% de agua. Eso quiere decir que cuando nos deshidratamos, estamos afectamos el rendimiento de casi todo nuestro cuerpo. Ninguno de los sistemas funcionan bien sin un adecuado consumo de agua. Beber suficiente agua y estando hidratado nos ayudará a perder peso, a reducir dolores en las articulaciones, a orinar, prevenir dolores de cabeza, al brillo de la piel, y a mejorar el rendimiento en general. Una de las mejores cosas que podemos hacer al levantarnos es beber medio litro de agua (2 vasos). El agua enciende nuestro metabolismo, nos hidrata, nos ayuda a botar toxinas, le da combustible a nuestro cerebro, y nos hace comer menos.
Evitemos tomar bebidas energizantes
Las bebidas energizantes estás cargadas con cafeína y azúcar en cantidades que son dañinas para nuestra salud. Mientras que las bebidas energéticas nos pueden dar un poco de energía cuando las tomamos, a la larga nos hacen estar más cansados y puede traer efectos secundarios como taquicardias, mareos y hasta convulsiones. Hay muchas bebidas que se pueden tomar, como el Te Verde o sólo café.
No fumemos o dejemos de fumar
Uno de cada dos fumadores morirá por los efectos de fumar. La nicotina y el monóxido de carbono contenidos en los cigarrillos pueden aumentarnos la presión sanguínea y los latidos del corazón, lo que puede aumentar el esfuerzo que hace nuestro corazón y nuestros vasos sanguíneos. El fumar aumenta las probabilidades de tener un infarto o un ataque cardíaco, con respecto a los no fumadores. El fumar nos hace 10 veces más propensos a tener cáncer de pulmón, sobre los no fumadores. Si no fumamos, mejor. Y si fumamos, dejemos de fumar. Nuestra vida será maravillosa sin fumar.
Organicemos nuestra vida
El ser organizado nos brinda un sentido de estar en control, reduce el estrés, y ayuda a aumentar la confianza en uno mismo. También nos permite concentrarnos en las cosas importantes, evitando el lidiar con las cosas triviales. Algunos consejos:
- Escribamos las cosas
- Démosle a cada cosa su lugar y pongamos cada cosa en su lugar
- Hagamos limpieza frecuentemente y tengamos sólo lo que necesitamos
- Usemos etiquetas de colores para clasificar las cosas
Tomemos desayunos con muchas proteínas
Seguro que hemos escuchado que el desayuno es una de las comidas más importantes del día. Tim Ferriss y algunos otros expertos en salud consideran que añadir unos 30 gramos de proteínas al desayuno es una de las mejores formas de perder peso.. Los estudios muestran que un desayuno rico en proteínas, en vez de estar rico en carbohidratos o en grasas, acelera nuestro metabolismo, nos mantiene llenos más tiempo y previene comer de más durante el día,
Vistamos con colores vibrantes
Una de las maneras más fáciles de cambiar nuestro estado de ánimo y estado mental es simplemente cambiar los colores con los cuales nos vestimos. Muchas de las respuestas a los colores son inconscientes, y no nos damos cuenta del efecto de ellos en nosotros. Pero el color es tan poderoso, que hay un campo de la medicina alternativa dedicado a la colorterapia. Rojo, naranja y amarillo evocan una amplia gama de emociones fuertes, mientras los colores como azul, morado y verde tienen efectos calmantes.
Ejercitemos por 20 minutos después de levantarnos
Cuando nos ejercitamos temprano en la mañana, nos despierta nuestro metabolismo y lo mantiene elevado por horas. Eso quiere decir que quemaremos más calorías durante todo el día gracias al ejercicio matutino. De hecho, las personas que hacen ejercicios en la mañana son más propensos a llevar a cabo la rutina diaria de ejercicio, que los que planifican hacerlo al salir del trabajo. No tiene por qué ser rutinas complicadas de ejercicios. Podemos probar algo como caminar, trotar, estirarse o pesas.
Durmamos lo suficiente
Muchas gente habla de trabajar en proyectos hasta las 4 de la mañana. Pero se olvidan de mencionar que la falta de sueño puede conducir a la depresión, envejece nuestra piel, puede hacer que olvidemos las cosas, y hasta puede hacer que engordemos. Recordemos que no es la cantidad de horas que se gasten en una tarea, sino la calidad de esas horas.
Definamos las tres tareas más importantes para el día
¿Cuáles son las tres cosas más importantes que podemos hacer hoy para acercarnos más a culminar nuestras metas? Escribamos esas tres tareas antes de empezar el día o en la noche antes para hacerlas una vez que nos levantemos. Ello nos ayudará a mantenernos enfocados en lo importante y nos ayudará a no perder el tiempo en tareas de baja importancia. Y si cumplimos esas tareas, nos sentiremos productivos, así no hagamos otra cosa que no sea lo que está en la lista.
La regla 60/10
Un buen consejo para aumentar la productividad: podemos colocar un temporizador en 60 minutos y concentrarnos en la tarea que vamos a llevar a cabo. Al finalizar los 60 minutos, nos levantamos y tomamos un descanso de 10 minutos, donde recargamos las energías caminando, conversando con un amigo, o tomándonos un café o un té.
Meditemos y expresamos agradecimiento
Vivimos en un mundo de gratificación instantánea. Queremos cosas y las queremos ya. Mucha de esa actitud puede ser atribuida a los últimos avances tecnológicos de los últimos 20 años. Pero la gratificación instantánea puede nublar nuestra habilidad para estar presentes y apreciar las pequeñas cosas. El agradecimiento es cambiar el enfoque de lo que le falta a tu vida a lo que actualmente tenemos. El agradecimiento hace que la gente sea más resiliente, mejora la salud y reduce el estrés. La meditación ayuda a darnos cuenta de las diferentes emociones y permite que fluyan. Arianna Huffington, fundador del Huffington Post, dice que una de las mejores maneras, y más económicas, para estar saludables y felices es a través de ejercicios mentales como la meditación. De acuerdo a Mark Williams, un profesor de Psicología Clínica en Oxford, la meditación ayuda a incrementar tu sentido de propósito y reduce los sentimientos de soledad y depresión.
Busquemos compañeros de responsabilidad
Cuando somos los únicos responsables, estamos más propensos a abandonar las tareas, retrasarlas no no completarlas. Responsabilidad es acerca de crear consecuencias reales y garantizar que se cumplan las metas. El crear incentivos y asignar responsabilidades son dos factores claves para alcanzar las metas. Tim Ferriss, autor del libro «La Semana laboral de 4 Horas», sugiere usar sitios como StickK, donde se pueden hacer compromisos públicos y se puede tener consecuencias financieras si se falla en cumplirlos.
No nos comparemos con los demás
Cada uno tiene sus propios retos, peleas y fracasos. Las comparaciones no tienen sentido y vienen en detrimento de nuestra confianza en nosotros mismos. En vez de compararnos con otras personas, enfoquemos nuestra energía en llegar a ser una mejor versión de nosotros mismos. Enfoquemos nuestra energía y atención en nuestras metas, y qué hace falta para completarlas.
Eliminemos a las personas que nos hunden
La vida es demasiado corta como para estar rodeada de personas negativas que lo que hacen es hundirnos. La manera más rápida de cambiar nuestras vidas es cambiar a los que nos rodean, y eso está en nuestras manos.
Escuchemos música o ruido blanco para mejorar el enfoque
Ruido de fondo a un volumen bajo nos ayuda a enmascarar otros sonidos distractores que pueden interrumpir nuestro trabajo, y puede mejorar nuestra creatividad y enfoque. Música de relajación, sonidos naturales o un simple ruido de fondo puede ayudarnos a concentrarnos y a mantenernos enfocados en nuestras tareas.
Hagamos primero las tareas más difíciles o las que menos no gustan
Cuando miramos la lista de las tareas, es tentador escoger la más pequeña, o la más fácil, para hacer de primero. Si tenemos un proyecto grande, puede que dejemos para después o que abandonemos una tarea que no nos gusta. Sin embargo, si terminamos primero esa tarea que no nos gusta, y la terminamos, tendremos la satisfacción de haberla tachado de nuestra lista y el resto de las tareas se verán más fáciles de hacer.
Escribamos las cosas y capturemos cada idea
Es imposible no pensar en las cosas. Muchas personas se distraen de una tarea que están haciendo, y empiezan a divagar y a tener otras ideas acerca de otras tareas o proyectos. Lo mejor que podemos hacer es capturar esas ideas, escribiéndolas en una libreta (física o electrónica). Una vez que están fuera de nuestra cabeza y escritas en papel (o en pantalla), nuestro cerebro se olvidará de ella y podremos continuar con nuestro trabajo.
Guarda las monedas sueltas en un recipiente
Un centavo aquí y un centavo más allá no parece algo que vaya a convertirme en millonario, pero cuando guardamos todas las monedas que nos sobran (el «sencillo», en Venezuela) en un solo lugar, veremos cómo rápidamente se va llenando. Cada vez que añadimos monedas al recipiente, estamos añadiendo dinero a una cuenta de ahorros que irá creciendo en el tiempo.
Anotemos los gastos del día de ayer
Llevar el control de nuestros gastos es la manera más inteligente de manejar nuestras finanzas personales. Escribir exactamente en qué compramos y cuánto nos costó nos da luces acerca de nuestros hábitos de gasto. Con el tiempo, nos daremos cuenta de las tendencias en nuestros gastos y podremos ser capaces de decidir dónde podemos recortar para ahorrar dinero.
Darnos de baja de correo basura y catálogos
Recibir correos y catálogos con descuentos y ofertas a veces nos lleva a efectuar gastos innecesarios. Ahorrar 20% en una compra no es ahorrar per se si tienes que gastar $100 para que te devuelvan $20. Deshacerse de esas comunicaciones pueden ayudarnos a evitar compras compulsivas y ahorrar dinero.
Preparemos nuestro almuerzo o merienda
Prepararnos el almuerzo en casa y llevarlo al trabajo, o hacer el café en casa en vez de comprarlos, no sólo es más saludable sino que nos ahorra dinero. Salir a comer fuera o a tomarse un café cada día suma al final del mes una buena cifra. Podemos hacer el café y el almuerzo en casa por una fracción de lo que gastaríamos afuera.
Usemos palabras positivas
Unos cuantos pensamientos positivos pueden cambiarnos el día entero por completo, para mejor. Si estamos teniendo problemas de confianza en nosotros mismos, esta puede ser la solución para sentirnos más felices con el día por venir.
Escuchemos nuestra canción favorita
Es asombroso lo que puede hacer por nuestra mente y cuerpo el solo escuchar nuestra canción favorita. No sólo la música va a estimular la liberación de hormonas que nos hacen más felices, sino que los recuerdos que nos traiga mejorará nuestro estado de ánimo. Sin darnos cuenta, estaremos cantando y bailando, dejándonos felices y listos para enfrentarnos con nuestro día.
Leamos un 10% de un libro de No-Ficción cada día
Leer es una tarea sencilla que nos puede proveer de múltiples beneficios. El leer con frecuencia hace que nuestro cerebro se ejercite, lo cual mejora nuestra concentración y retrasa los efectos del envejecimiento en la capacidad mental. Libros de No Ficción tienen la particularidad de aumentar nuestro conocimiento, mejora las habilidades de pensamiento analítico y nos brinda la oportunidad de aprender algo nuevo en sólo unos minutos al día.
Aprendamos una palabra nueva cada día
Expandir nuestro vocabulario trae una amplia gama de beneficios. Mejoraremos nuestra habilidad para comunicarnos, le daremos a nuestro cerebro ejercicio y mejoraremos nuestra confianza en nosotros mismos en situaciones sociales. Podemos usar un diccionario en el idioma de nuestra preferencia y escoger palabras al azar, o podemos suscribirnos a una lista de correo de «una palabra al día», disponibles en sitios web para aprender otros idiomas.
Traducido por Luis Castellanos de publicación tomada de Lifehack.