Presentado en California el disco duro SSD con más capacidad del mundo
Aunque de unos años a esta parte se ha pasado a hablar de terabytes en lugar de gigabytes, el espacio de almacenamiento se ha quedado corto. No obstante, pronto se dejarán de sacrificar películas y fotografías en RAW, ya que Samsung ha presentado el disco duro más grande del mundo durante la convención Flash Memory Summit,que se celebra estos días en California.
Se trata de un disco duro de estado sólido (SSD), de 16 TB de capacidad de almacenamiento en tan solo 2,5 pulgadas, que lo hace compatible con la gran mayoría de los dispositivos del mercado. Bautizado como PM1633a, el nuevo disco duro integra 500 chips de memoria NAND Flash con diseño tridimensional de 256 Gigabits, dispuestos a lo largo de 48 capas. Hasta ahora los discos duros eran de un tamaño más grande y no disponían de tanta capacidad de almacenamiento. Sin embargo, Samsung ha dado un golpe sobre la mesa con la nueva NAND flash de 256Gbit, que dobla en capacidad a las presentadas el año pasado, y dice definitivamente adiós a los platos magnéticos.
Gracias a los nuevos chips de memoria flash, anunciados por la compañía esta semana, el disco duro proporciona una capacidad real de 15,36 TB, que si bien no alcanza los 16 TB, se trata igualmente de un verdadero hito en el campo del almacenamiento de datos. Hasta la fecha, los discos duros más potentes eran de formato tradicional (HDD) y a duras penas llegaban a los 10 TB.
Disponible en cinco años
El anuncio no deja dudas de que los discos duros de estados sólido se están imponiendo sobre los discos duros tradicionales al proporcionar una mayor velocidad de transferencia y cargar más rápido las aplicaciones, las operaciones en ficheros y los videojuegos. No obstante, el precio de estos dispositivos es todavía desmesurado, de modo que su comercialización se limita al ámbito empresarial. En este caso, se estima que la primera generación tendrá un coste de 7.000 euros la unidad.
Por el momento, no se ha dado a conocer una fecha de disponibilidad, si bien se prevé que, como mínimo, tarde 5 años en llegar a los hogares.
Vía El Periódico